La investigación se inició en 2018 pero en 2021 Alberto Fernández había pedido retirarse. El próximo domingo 28 son las elecciones presidenciales en Venezuela.
A una semana de las próximas elecciones presidenciales en Venezuela, la Argentina realizó un giro de política exterior y pidió reincorporarse a una denuncia que se tramita en la Corte Penal Internacional (CPI) por crímenes de lesa humanidad cometidos en el gobierno chavista entre 2014 y 2017, donde se investiga a Nicolás Maduro y los principales mandos de la administración.
La denuncia había sido presentada en 2018 en el marco de una iniciativa del Grupo de Lima -del que la Argentina formaba parte por ese entonces-, pero que en 2021 el presidente Alberto Fernández ordenó retirarse al renunciar también como miembro de este grupo de países.
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Tras una decisión política que bajó directamente desde Casa Rosada, hoy la Argentina le comunicó al órgano judicial que decidió reincorporarse al proceso. “Es congruente con las acciones y declaraciones que el Gobierno argentino ha venido adoptando desde el 10 de diciembre frente al deterioro de la situación política y de derechos humanos en Venezuela”, explica un breve comunicado de la Cancillería argentina.
De esta manera, el gobierno nacional decidió redoblar la presión contra Nicolás Maduro poco después de que el chavista insulte a Javier Milei y lo acuse de formar parte de un supuesto plan para boicotear los comicios del próximo 28 de julio. Sucede, además, en medio de la negativa de Venezuela por otorgar un salvoconducto a los seis asesores de María Corina Machado que desde marzo están asilados en la residencia argentina en Caracas.
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