San Lorenzo y Racing llegaban a este cruce histórico con realidades distintas. El conjunto de Boedo con la intención de sumar puntos para clasificar a la Copa Sudamericana 2025, mientras que el equipo de Avellaneda lo hacía con la cabeza puesta en la final de la Sudamericana, a jugarse el sábado que viene frente a Cruzeiro en Asunción.
Gustavo Costas ubicó un equipo mixto, con cinco jugadores que probablemente sean titulares en su partido más importante del año. Arias, Di Cesare, Santiago Sosa, Gabriel Martirena y Salas estuvieron desde el arranque. Del otro lado, Miguel Russo repitió el plantel que venció 1-0 a Central en Rosario, a pesar de tener en condiciones físicas a Iker Muniain, quien se recuperó de una lesión.
El local tomó la iniciativa y jugó en campo rival, teniendo el control de la pelota. Cuatro defensores, un doble cinco, tres mediocampistas mas adelante y un centrodelantero fue el primer dibujo táctico de Russo. En cambio, el conjunto de Costas se replegó para salir de contragolpe, con una línea de tres centrales, cuatro mediocampistas y tres delanteros.
De esta manera, se paró muy atrás y le costó recuperar la pelota. La primera aproximación fue para el local, mediante un cabezazo de Cuello tras un centro de Bustos de pelota parada. La visita respondió con una contra en velocidad de Carbonero, que llegó al fondo y definió con derecha, pero agarró bien parado al arquero.
La clave de San Lorenzo pasaba por la derecha, con la velocidad de Cerutti y los centros que mandaba al área para que Cuello terminara la jugada. El centrodelantero tuvo un cabezazo que se fue por encima de travesaño. Por el otro sector, hubo un duelo de veloces entre Mura y el atacante Leguizamón, quien tuvo su ocasión de gol con un disparo que encontró a Arias bien parado. De contrataque, Luján se desconcentró en el fondo, Carbonero le ganó la posición para concretar, pero justo Romaña le sacó la pelota. Cuello, a la media hora, definió por encima de Arias, y San Lorenzo sacó ventaja en una jugada rápida letal en la cual quedó mal parado Racing.
El primer tiempo fue de ida y vuelta, de mucho suspenso y con claras situaciones de gol para un lado y el otro. El local proponía juego por las bandas con las velocidades de Cerutti y Leguizamón, y aprovechaba los errores del rival en defensa. Por su parte, Racing apostaba a la gambeta de Carbonero que quedaba mano a mano con Luján, y a la de Solari por izquierda.
En el complemento, Racing salió decidido a buscar el empate, aunque mantuvo el dibujo táctico. La visita tomó el dominio de la pelota, arriesgó parándose un poco más adelantado, mientras que San Lorenzo se defendía. Solarì intentó con un remate/centro y el arquero Gómez embolsó. El local esperó el momento para cerrar el partido. Lo tuvo en una contra entre Cerutti, Bustos y Cuello que no llegó a definir. También, con un tiro libre del exTalleres.
Con el paso de los minutos, Racing empezó a tener juego colectivo entre Salas, Carbonero y Mura, pero le faltaba la estocada final. Los cambios en Racing y en San Lorenzo trastocaron el equipo. La visita dominó la pelota y jugó mejor, mientras que el local se desordenó y no fue el mismo del primer tiempo. Racing llegó el empate: Solarì mandó un centro fuerte y Mura la conectó detrás de Romaña para el 1-1.
Los últimos diez minutos fueron de ida y vuelta, de mucha intensidad. Sosa le pudo haber dado el triunfo al local, pero su disparo se fue desviado. Pero en la última jugada, Gómez tuvo una salida en falso y Mura se zambulló para de cabeza darle la victoria a la visita.
Racing, con estos tres puntos, se prende en la lucha por el título, y llega con la autoestima muy elevada para disputar la final de la Sudamericana. En San Lorenzo, Russo se apuró con los cambios y lo terminó pagando caro. El equipo se fue silbado y sufrió la segunda derrota de la mano del entrenador experimentado.