Este jueves el Gobierno de Javier Milei fijó por decreto la nueva actualización del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM). En un aumento miserable de $ 8.146 para diciembre, llegando a marzo a tan solo $ 296.832, la administración libertaria busca seguir consolidando la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores, especialmente de aquellos que viven en la informalidad y de quienes perciben algún tipo de beneficio o subsidio estatal.
El Gobierno, que habla de la importancia del libre acuerdo en el mercado, parece no aplicar la misma regla cuando se trata del laboral. Al no haber existido acuerdo en el Consejo del Salario, integrado por las centrales sindicales y las cámaras empresariales (lideradas por la UIA), Milei decidió dar el miserable aumento que pedían las patronales con su sola firma. Por su parte la CGT y las CTA, avalan con su pasividad ese ataque al ingreso de los trabajadores.
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Pero a pesar de esa burla a los trabajadores por parte del Gobierno de Milei, el vocero oficial continúa provocando y lanza ideas de imposible concreción pero que muestran, además de la hipocresía del ministro que cobra $3.580.000 por mes, los deseos de las patronales y la disposición del Gobierno a mostrarse como su garante.
Durante la conferencia de prensa de este jueves dijo que el Salario Mínimo no debería existir “porque impide a los empresarios contratar a gente dispuesta a ganar un sueldo por debajo de esa pauta”. Es decir que junto al Gobierno que integra, quieren condiciones de semiesclavitud para los trabajadores. Algo que no sorprende a quienes conocen los intereses que representa la administración libertaria, pero que desnuda otra vez la falacia de campaña de que “al ajuste no lo iba a pagar la gente”.
La hipocresía de Adorni y el Gobierno es aún mayor si se tiene en cuenta que el vocero, junto a su sueldo de casi $4.000.000 maneja una caja de $260 millones por mes, correspondiente a la Secretaría de Comunicación y Medios. Tiene además, a su cargo 191 empleados, de los cuales nombró a más de 100 desde diciembre de 2024.
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Da la pauta de las prioridades del gobierno que el área de Adorni cuente con más directores que carteras como la de Capital Humano, que tiene a su cargo áreas sociales sensibles. Se trata de una estructura enorme, con 7 Direcciones Generales Nacionales y nada menos que 14 direcciones comunes, coordinadas para mantener el aparato de propaganda y de trolls. El Gobierno, que habla de achicar el Estado, agrandó el área de manera significativa, haciéndola aún más “deficitaria”.
A eso se suma que el vocero, que la semana pasada anunció sus vacaciones en Miami, metió también en el Estado a su hermano, el ñoqui Francisco Adorni, quien cobra también otros $4.000.000 en el Ministerio de Defensa. Más casta imposible…
El obsceno contraste entre la consolidación actual de la baja del Salario Mínimo y los sueldos millonarios de los sueldos de los funcionarios que en campaña decían venir a combatir a la casta, muestra que cualquier tipo de pasividad por parte de las organizaciones sindicales y sociales es criminal para con la clase trabajadora. Es necesario que las centrales que se sentaron en el Consejo del Salario no dejen pasar este nuevo ataque y llamen a medidas contra el plan de Milei de conjunto.
Es necesario organizar un plan de lucha que enfrente el ajuste impulsado por Milei y el FMI. Hay que recuperar lo perdido y garantizar que los salarios, jubilaciones y asignaciones estén ajustados a la inflación. Además, se debe exigir un salario mínimo que, como base, sea equivalente al costo de la canasta básica familiar.