El fútbol es pasión, intensidad y, a veces, excesos. Este sábado, en los octavos de final de la FA Cup, el duelo entre Crystal Palace y Millwall quedó marcado por una acción violenta que derivó en expulsión, lesión y debate. A los 8 minutos del partido, el arquero visitante Liam Roberts protagonizó una patada temeraria al delantero Jean-Philippe Mateta, desatando indignación y confirmando, una vez más, la importancia del VAR en el deporte rey.
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Una salida catastrófica
El Selhurst Park, estadio del Crystal Palace, fue testigo de un momento que trascenderá por su crudeza:
- Minuto 8: Un balón elevado hacia el área de Millwall desencadenó la tragedia. Mateta, con ventaja de velocidad sobre el defensor Jake Cooper, se lanzó hacia el esférico.
- Reacción desmedida: Roberts, en lugar de buscar el balón, elevó su pierna derecha con los tacos al frente, impactando directamente en el rostro del francés.
- Consecuencia inmediata: Mateta cayó fulminado, inmóvil sobre el césped, mientras el silencio invadía la grada.
La imagen que lo resume todo: Tacos del arquero clavados en la cara de un rival indefenso. Juego violento en estado puro.
La intervención del VAR: Confirmación de lo inexcusable
Aunque la falta parecía obvia, el árbitro Michael Oliver optó por revisar el VAR:
- Revisión minuciosa: Las imágenes mostraron sin ambigüedad la peligrosidad de la entrada: pierna alta, contacto con la cara y nulo intento de jugar el balón.
- Decisión final: Tarjeta roja directa para Roberts por «juego violento», según el reglamento de la FA.
- Críticas y apoyo: Mientras algunos aficionados cuestionaron la demora, otros aplaudieron la prudencia del colegiado para evitar errores.
Secuelas: Mateta fuera del campo, Millwall con diez
El desenlace del incidente afectó a ambos equipos:
- Retirada en camilla: Mateta, visiblemente afectado, fue sustituido por Eddie Nketiah. Su condición médica se evalúa, aunque se descarta fractura.
- Millwall en desventaja: Con Roberts expulsado, el equipo visitante jugó 82 minutos con diez hombres y un arquero suplente sin ritmo competitivo.
- Impacto anímico: Crystal Palace, aunque con ventaja numérica, perdió a su delantero titular en un partido clave para la FA Cup.
¿Fue evitable?
Expertos y exárbitros coinciden en varios puntos:
- Error de cálculo: Roberts priorizó la fuerza sobre la técnica. Una salida con los puños o el cuerpo bajo hubiera sido segura.
- Tacos altos, sanción segura: El reglamento es claro: toda acción que ponga en riesgo la integridad del rival es tarjeta roja.
- VAR como aliado: Sin la revisión, la presión sobre Oliver habría sido mayor. La tecnología evitó una polémica mayor.
¿Castigo suficiente?
- Comunicado de Millwall: El club lamentó el incidente y aseguró que «Roberts asumirá las consecuencias disciplinarias internas».
- Palabras de Mateta: Tras los exámenes, el francés publicó en redes: «Gracias por los mensajes. Estoy bien, fue un susto enorme».
- Opinión pública: En redes, los hinchas exigen sanciones ejemplares para evitar repeticiones.