Los responsables legales de las empresas Serrán Center SL y Escola Deportiva Meridiem han presentado un escrito ante la Audiencia Provincial de Salamanca en el que acusan a un socio y dos presuntos testaferros del comisionista de las mascarillas Víctor de Aldama de concertarse para apropiarse del centro deportivo Bamio, situado en Orense y que está valorado en 3,7 millones de euros, según consta en el documento, al que ha tenido acceso esta redacción.
«No hay otra conclusión posible que entender que Antromero Desarrollo Empresarial SL y los acusados Félix Aparicio y Raquel Rodríguez Menéndez actuaron en connivencia para despatrimonializar la mercantil Salalim XXL SL», propietaria del inmueble orensano, destaca el documento dirigido al tribunal que juzgará el 11 de junio a los dos empresarios por estafa impropia, alzamiento de bienes y frustración de la ejecución por el impago de un préstamo de 430.000 euros con el que adquirieron el complejo deportivo orensano.
Félix Aparicio y Víctor de Aldama en una imagen de la UCO / EPE
En concreto, la versión del denunciante de la presunta estafa considera que la empresa Salalim XXL SL se hizo con el terreno valorado en 3,7 millones para después vender el 50% por un precio muy bajo. «Félix Aparicio y Raquel Rodríguez Menéndez, hoy acusados, procedieron primero a concertar, -en octubre de 2021 y mediante escritura pública-, el negocio de la venta de la mitad del […] activo o bien patrimonial de su sociedad, el complejo deportivo “Bamio” a favor de la entidad “Antromero Desarrollo Empresarial” por el precio de 365.000 euros suma que, a la postre, no se ingresa, desde luego en su totalidad o en su mayoría, en la caja social de la sociedad Salalim XXL, S. L., […] sino que acaba siendo ingresada y depositada en la cuenta personal de uno de los socios de la misma (en concreto, del socio Félix Aparicio)», destaca el mencionado documento dirigido al tribunal.
«Testaferro cualificado»
Se da la circunstancia de que la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil atribuye a Félix Aparicio la condición de «testaferro cualificado» de la organización criminal que, liderada por el propio Aldama, cometió un millonario fraude en la venta de hidrocarburos. También considera que el apoderado de Antromero Desarrollo Empresarial SL, Luis Alberto Escolano, es un hombre de paja del comisionista.
Luis Alberto Escolano, uno de los tres socios de Víctor de Aldama, a su llegada a la Audiencia Nacional el pasado 11 de noviembre. / EFE
En los casos Koldo e Hidrocarburos la UCO identifica el papel de los dos empresarios mencionados. Díaz Tapia es uno de los socios de Aldama incluidos en el chat de whatsapp denominado los ‘Mosqueteros’, con el que el comisionista hizo negocios durante la pandemia con los Gobiernos de Baleares y Canarias. Por su parte, el papel de Escolano es incluso más relevante, pues la UCO sostiene que era el hombre de confianza de Aldama, y cuyo contacto telefónico era el de «hermanito».
1,8 millones
Pero no solo la empresa Salalim entregó su patrimonio a Antromero, controlada por el testaferro de Aldama, sino que el otro 50%, cuyo valor sería de 1.893.477 euros, sirvió para comprar acciones de la empresa Delorean Plus Dream SL. Esta firma también está a nombre del ‘mosquetero’ Díaz Tapia, aunque en este caso el apoderado solidario es directamente Víctor de Aldama.
Por eso, las acusaciones califican los hechos como «turbios», y por eso se oponen al acuerdo extrajudicial al que habría llegado la mercantil Antromero Desarrollo Empresarial SL con el acusado Félix Aparicio y su exmujer Raquel Rodríguez Menéndez.
Y de cara al juicio señalado en la Audiencia Provincial de Salamanca los denunciantes consideran que tendrían que ser «citados para que comparezcan como testigos Luis Alberto Escolano, apoderado de Antromero Desarrollo Empresarial SL e Ignacio Díaz Tapia, administrador único de la indicada mercantil», concluye el documento.