A Sinner le basta con lo justo

Sin brillantez pero sin sufrimiento sigue avanzando Jannik Sinner por el Open de Australia en busca de defender su corona. El italiano ya está en cuarta ronda tras superar a Marcos Giron tirando de practicidad. 6-3, 6-4 y 6-2 en dos horas de partido.

Sigue sin ser la apisonadora a la que nos tenía acostumbrados el número uno mundial, aunque sigue contando por victoria todos sus encuentros desde la derrota en Pekín ante Carlos Alcaraz hace más de tres meses.

Son ya diecisiete consecutivas tras la conseguida ante un Giron que sin estar demasiado lejos en el marcador, no pudo ni siquiera hacer dudar a Sinner, que hizo vale su fiabilidad del 94% en sets conseguidos con roturas en los primeros juegos. Y así lo volvió a hacer.

Le bastó con una rotura tempranera en los tres parciales para volver a vencer sin ceder un solo set, racha que se rompió ante Schoolkate en segunda ronda. Fiabilidad con el servicio y capacidad de reacción cuando Giron intentó apretar desde el resto, sobre todo a partir de final del segundo set.

Sacó sus golpes ganadores cuando lo necesitó y trató de emplear lo mínimo para poner rumbo a los octavos de final, donde espera rival, que saldrá del duelo entre Holger Rune y el serbio Kecmanovic.

«Estoy muy feliz de estar en la siguiente ronda. Siempre es complicado jugar en estas condiciones» aseguró el italiano sobre la pista tras sumar una nueva victoria en Australia. La décima consecutiva en el territorio y la número 32 en sus últimos 33 partidos.

MONFILS SIGUE MARAVILLANDO

La edad es solo un número y eso bien lo sabe Gael Monfils, que vive una eterna segunda juventud en este 2025. El francés, que ya ganó en Auckland, se ha clasificado para los octavos de final en el Open de Australia tras derrotar a Taylor Fritz.

Lo hizo además remontando el set adverso inicial, demostrando que vive uno de los momentos más dulces de su carrera a sus 38 años. Con su victoria ante Fritz, el francés se convierte en el segundo hombre de mayor edad en llegar a los octavos de final del Abierto de Australia desde 1988, tras Roger Federer, que lo consiguió en 2020.

«Trabajo duro y trato de ser disciplinado, recuperarme bien después de los partidos y confiar en mi equipo. Y, con un poco de suerte, estoy en la segunda a semana aquí” espetó un Monfils orgulloso después de sumar su octava victoria consecutiva y alcanzar por sexta vez los octavos de final en Australia.

Tras superar a Perricard, Altmaier y Fritz, el francés se medirá ahora al vencedor del duelo entre Shelton y Musetti. En el Grand Slam de la rebelión de la nueva generación, Monfils toma el mando a sus 38 años. Los 𝐯𝐢𝐞𝐣𝐨𝐬 𝐫𝐨𝐜𝐤𝐞𝐫𝐨𝐬 nunca mueren

De Miñaur mantiene vivo el sueño

Australia sigue soñando con la posibilidad de volver a ver un jugador local levantar el título en el primer Grand Slam del año. Su gran esperanza, Álex De Miñaur, superó sin mucha dificultad su tercera prueba ante el argentino Cerúndolo por 5-7, 7-6(3), 6-3 y 6-3.

Desde que Mark Edmonson se alzara campeón en 1976, Melbourne Park no ha podido ver celebrar a ningún otro campeón australiano en el cuadro masculino, algo que solo puede hacer el propio De Miñaur, único jugador local todavía vivo en todos los cuadros del torneo.

Por cuarta vez consecutiva en octavos, se medirá ahora a Alex Michelsen que tras dejar en el camino a Tsitsipas en primera ronda, hizo lo propio con Khachanov en tercera. De vencer, podría topar con Sinner en unos cuartos que volverían a levantar la ilusión a toda la afición australiana que sueña con ver al ‘Demon’ campeonar en su casa.

También superaron ronda el italiano Sonego que superó a Marozsan, Tien que sigue con su sueño tras apear a Moutet y Shelton que venció en un gran partido a Musetti.