“Eres lo que comes”, es una de las frases populares que hacen referencia a la importancia de la alimentación en las personas y como los hábitos de consumo pueden mejorar o afectar el estilo de vida de cualquiera.
Y es que la comida es la gasolina que da energía para seguir con el día a día, en consecuencia, se tiene que ser cuidadoso con lo que se come, así se pueden prevenir diferentes enfermedades y disfrutar de una vida plena.
Comer saludable, sin embargo, no significa privarse de alimentos deliciosos, ni de aquellos sabores, texturas y aromas que hacen de la comida uno de los principales placeres de la humanidad.
Es por eso que te traemos una serie de recetas saludables, ricas y fáciles de hacer. En esta ocasión el platillo es ensalada cubana, una preparación traída de «My Plane», un proyecto del Departamento de Agricultura del Gobierno de Estados Unidos.
Esta ensalada clásica de mezcla de lechuga, tomates, cebolla y rábanos se llena de vida con un refrescante aderezo de aceite, jugo de limón y sazonadores.
3 cucharadas aceite vegetal
1/4 taza jugo de limón verde fresco (1 limón verde grande o dos pequeños)
1 cucharadita ajo (pelado y picado finamente)
1/4 cucharadita sal Kosher
1/4 cucharadita pimienta negra
Para preparar el aderezo:
1.Ponga el aceite, jugo de limón verde, ajo, sal y pimienta en un tazón pequeño y mezcle bien. Se puede usar jugo de limón amarillo en lugar de verde.
Para preparar la ensalada:
1. Coloque la lechuga, tomates, cebolla y rábanos en un tazón de mezclar y revuelva hasta que se combinen bien. Se puede usar cebolla blanca en lugar de morada
2.Vierta el aderezo sobre la mezcla de lechuga y revuelva. Sirva de inmediato.
Para incluir una proteína, añada una lata de atún bajo en sodio, o salmón sobre la ensalada.
Cada cuerpo y estilo de vida es distinto, esto significa que las necesidades al momento de alimentarse podrían ser diferentes de caso a caso. Lo ideal es acudir a un nutriólogo o especialista para recibir ayuda especializada.
Sin embargo, existen una serie de consejos generales que pueden ayudar a mejorar la forma alimenticia y dar un primer paso para una vida más saludable.
Para lograr una alimentación sana y balanceada, los especialistas del sector salud recomienda aumentar el consumo de frutas, verduras y cereales integrales, así como incluir en la dieta, de forma moderada, todos los grupos de alimentos derivados de la leche, así como carnes, huevo, pescado y leguminosas, así como también grasas y aceite.
En contraste, se recomienda la reducción en el consumo de grasas saturadas, así como de azúcares y bebidas azucaradas y en su lugar optar por aceite de oliva, cártamo, soya o sustitutos de azúcar.
Sobre los horarios de alimentación, se recomienda comer tres veces al día y considerar dos colaciones, así como ingerir al menos dos litros de agua al día.
Es importante mencionar que si bien la nutrición saludable se refiere a la ingesta de alimentos en relación con las necesidades dietéticas del organismo, también debe estar acompañada de ejercicio físico regular, para tener una buena salud.