De manera lamentable, un accidente vial de un micro en Cochabamba en el centro de Bolivia dejó un saldo fatal de al menos 20 muertos. Dentro de los heridos que pudieron salir con vida de la colisión se encontraba Erwin Tumiri.
Se trata de un técnico de aviación que se transportaba en el autobús y quien fuera uno de los seis sobrevivientes de la recordada tragedia aérea del Chapecoense.
Sí, creer o reventar. El boliviano estuvo en el vuelo que llevaba a la delegación del conjunto brasileño rumbo a Colombia en noviembre del 2016, para disputar la final de la Copa Sudamericana ante Atlético Nacional.
En aquel triste suceso, el aeroplano de LaMia se quedó sin combustible y se estrelló, dejando un saldo de 71 decesos (sobre 77 pasajeros). La entidad de Santa Catarina perdió a gran parte de su plantel, menos a Alan Ruschel, Jackson Follman y Helio Neto.
También habían sobrevivido el periodista Rafael Henzel (que falleció un año y medio después por un paro cardíaco) y dos tripulantes de la empresa boliviana: Ximena Suárez y justamente Tumiri, quien ahora pudo zafar de otra situación trágica.
En la madrugada de este martes, el hombre en cuestión estaba a bordo del micro de la compañía Carrasco (con 45 personas) que cayó por un precipicio de aproximadamente 150 metros, a la altura del kilómetro 72 de la ruta que une Cochabamba con Santa Cruz.
«Está estable, gracias a Dios. Una vez más, se salvó», expresó su hermana Lucía Tumiri en diálogo con el medio local Los Tiempos. Y añadió: «Tiene heridas en la rodilla y raspaduras en la espalda, tiene una cortadura en la rodilla y le van a costurar”.